9 dic 2012

Angeles suicidas

Inmortal soy, inmortal seré, nací de una lágrima para curar las enfermedades de todos los corazones rotos... nací del dolor para calmarlo, nací del tormento más común del mundo para crear paraísos, y durante estos años he creado muchos, he devuelto el amor a algunos, he hecho que no se rindan ante nada, que sepan sobrellevar todo, TODO. Pero con algunos no he podido, algunos a los que he acudido se han enamorado de este inocente ángel.

No te puedes enamorar de un angel, será una muerte dolorosa y eterna, quien observa a un ángel obtendrá el paraíso que este puede crear, quien se enamora de un angel, obtendrá, ni más ni menos, que el infierno del que este nació.

Y así es nuestra vida, la de todos los angeles, no podemos amar, pero sí ser amados, hacer daño a quién nos ama y nunca sentir lo mismo. Siento que es cruel e injusta nuestra naturaleza, siento que de cada persona que de mi se enamora un infierno le espera. No quiero seguir con esto, doy amor correspondido a todo el que lo pide, veo como ellos son felices con su amor, la envidia me invade, me intentan dar amor y yo no la sé recibir, nadie me enseñó y sería pecado aprender.

Ojalá fuese como ellos, ojalá pudiese amar así, ojalá... No queda otra escapatoria, quiero desaparecer, mi trabajo ha terminado, estoy harto ya de esto.
Ahora mismo estoy pensando, mi cabeza está llena, no hay forma de vaciarla, tantos años con la misma tortura. Estoy preparada, me clavaré la misma flecha con la que sano corazones.




1 dic 2012

Una de rocas

Aquella noche solitaria, un 30 de Noviembre, bajo la Luna llena pensaba una personita en cada persona de este mundo, y no cabía en su mente tanta gente que este mundo aloja, tantas personas, animales, plantas... tantos seres vivos, tantas rocas, tantas cosas.

Y al fin y al cabo todos somos eso, rocas que caen, ruedan y permanecen en esta vida. Muchas de esas rocas acaban chocando con otras, y otras, en esa colisión algunas crean tanto que llegan a crear fuego, parece un conjuro, magia lo que crean puede durar poco ese fuego, pero que haya sido creado nunca se olvidará. Otras... al chocar, las más débiles, se rompen, se destrozan y nunca más podrán llegar a ser las mismas de antes, seguirán pequeñas y más frágiles para siempre. Pero todavía tienen esperanza, todavía hay solución, ¿acaso alguien sabe lo que podría llegar a pasar? Quién sabe si de esas pequeñas piezas destrozadas, junto a otras también destrozadas no se crea un hermoso mármol  y es que todos podemos revivir incluso las muertas rocas. El problema... es que siempre se cruzan diamantes en nuestra vida, tan bellos, tan hermosos, tan brillantes y a la vez tan difíciles de que colisionen contigo, difícil que una piedra como aquella llegue a crear fuego contigo... pero posible, todo es posible.
Y es que lo más mágico de todo esto es que todos podemos transformarnos y llegar a ser un diamante para alguien.