27 oct 2013

Oscura felicidad.

Un alma en blanco y negro con un envoltorio repleto de colores. La luz que hay en mi alma y las lagrimas que antes se esconden, crean un gran arcoiris en mi superficie, esconden la tristeza, la melancolía, todo lo que desborda en ese limite entre interior y exterior, esa piel cristalina que consigue separar cada color de una potente luz, que convierte la anguistia en felicidad.

A veces me pregunto si soy feliz y no sé que contestar, no soy falsa, ni llevo una continua máscara, disfruto del día en el que sonrío, y disfruto de cada noche pensativa... Soy feliz con la angustía, es parte de mi interior, y me quiero, quiero todas esas lágrimas guardadas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario