6 jun 2012

La presa


Somos la presa, la presa de esta sociedad, somos débiles ciervos recién nacidos aprendiendo a andar, a comer y a respirar.

Hay un gran león observándonos, teniendo en cuenta cada paso que damos, lo que no sabe es lo que ocurre dentro, lo que más nos preocupa, nuestra arma de destrucción mutua. No sabe que aparte de él, ese león hambriento que quiere destrozarnos, devorarnos y disfrutar de nuestra rápida muerte, hay un ciervo en nuestro interior, un ciervo que puede correr pero es inválido, porque no ha salido de nuestro interior nunca. Ese ciervo que nunca ha visto la luz cuando se ve en una situación en la que nosotros no podemos darle sombra se queda ciego e impotente. Ese pequeño ciervo es el que hace que el león consiga matarnos.

Por eso debemos sacar a nuestro ciervo, enseñarle el mundo, arriesgar su vida. Aunque tengas mucho miedo. Ese ciervo se acostumbrará a la luz, poco a poco. Y cuando realmente necesites sacarlo al exterior ese ciervo será fuerte, podrá correr y correr por el campo. Y conseguirá escapar de las garras del león.

No escondas a tu ciervo, habrá algún que debas liberarlo, si nunca antes le habías enseñado el mundo MORIRÁ.

//Squeeze my hand.//

2 comentarios: